Vade retro

Uno de los elementos de mayor uso en embalajes -desde comida a juguetes- es el poliestireno expandido, al que en algunos países denominan corcho blanco.

Todo su proceso de elaboración constituye un atentado a la calidad de vida. Se fabrica con benceno, que es cancerígeno.

Convertido en estireno, se le inyectan gases para transformarlo en espuma y frecuentemente el gas que se usa es de la familia de los clorofluorcarbonos (CFC) responsable en un 15 % del calentamiento de la atmósfera y devorador de la capa de ozono.

Como si todo esto fuera poco, una bandeia de poliestireno expandido (tan en boga en los supermercados para envasar desde carnes a verduras) tarda 500 años en degradar y en todo ese tiempo se va descomponiendo en pequeñas bolitas cuya ingesta suele ser mortal para muchos animales.

Como tienen aire inyectado los artículos elaborados con poliuretano expandido tienen bajo peso, pero ocupan mayor espacio y esto hace que terminemos rompiéndolos para que entren el el basurero.

Para este caso no hay opción posible. Lo mejor es evitar utilizar elementos de corcho blanco y reclamar a las empresas productoras su reemplazo por otro material menos dañino al equilibrio ambiental.

Para todos los gustos

La aparición del material plástico causó toda una revolución, por cuanto posibilitó el desarrollo de nuevos productos y, lo que es muy importante, en grandes cantidades y al alcance de la mayoría por su bajo precio.

Los que mas conocemos son el polietileno (PE), presente en bolsas y envases, el más resistente PVC, de múltiples aplicaciones y que vemos en canerias de agua, el PET (sigla del tereftalato de polietileno) que encontramos en los envases de bebidas gaseosas y el poliestireno ex mos cuán conveniente es evitar su uso.

Es innegable que la popularización del uso del plástico vino a resolver un buen número de situaciones, pero progresivamente todo el proceso global fue a la vez generando nuevos y serios problemas.

La bolsa plástica en que acumulamos los residuos de nuestra casa no es biodegradable, de modo que permanece largo tiempo causando efectos nocivos sobre el entorno natural, lo mismo que los artículos o partes de ellos que desechamos por rotura o porque ya no nos son útiles.

El plástico es reciclable y solo no puede ser utilizado para contener alimentos. Otra vez nuestro problema radica en la falta de adecuados canales de recolección selectivos.

De todos modos, podemos adoptar algunas conductas para no acumular plásticos en los basureros. Un Juguete que los chicos ya no usan en lugar de ir a la basura podemos llevarlo a alguna institución benéfica, que sabrá darle un buen destina.

Antes llevar a la bolsa de residuos alguna cosa que hemos sustituído, consultemos a familiares y amigos porque a otra persona le puede ser útil.

Al salir de compras llevemos nuestrq propia bolsa de tela para no acumular bolsitas de polietileno que terminarán en el basurero. Si cada comprador evita en §1 supermercado llevar una boisita plástica, podriamos ahorrar miliones de kilos de polietileno cada año y con ello una gran cantidad de valioso petróleo, ya que los plásticos de él proceden

Muchos productos únicamente se venden en envases plásticos por lo que es inevitable llevarse a casa una botella de leche o de aceite. Pero otros si se presentan en distintas variantes de envase y-por nuestra propia concieniencia- es mejor optar por los que no son de plástico.

En varias naciones ya está en el mercado un polietileno fotodegradable, que se van destruyendo por acción de la luz solar lar sin efectos contaminantes y también se están popularizando ios plásticos degradables, que no son la gran solución, pero que al menos causan menores problemas en el ambiente.

Como consumidores podemos incidir-y hasta presionar- para que se masifique el uso de plástico degradables y para que se los reemplace como envase toda vez que sea posible.

Podemos premiar con nuestra compra a las empresas que utilicen envases reciclables y-lo más irnportante- que se ocupen de su recolección, algo que no todas, y casi puede decirse que la mayoriaJ no hace directamente ni por acuerdos con la administraciones comunales.

Disponemos de plásticos para todas las necesidades y todos los gustos. En muchos casos su reernplazo por otro material encareceria notablemente el producto, por lo que debemos anotarle varios puntos a favor y dejar en claro que no es el malo de la pelicula.

En todo caso ese papel le corresponde a quienes no hacen un uso adecuado y conveniente de este material.


Volver a la CARTA DE PRESENTACION